Las fosas sépticas son estructuras dedicadas a recibir las aguas residuales de una vivienda que se encuentra fuera del alcance de la red de alcantarillado público. En ese sentido, comparten utilidad con los pozos ciegos de toda la vida pero hay una enorme diferencia entre estas dos estructuras: los pozos ciegos solo reciben las aguas residuales, mientras que las fosas sépticas también las tratan. De hecho, los primeros suelen filtrar residuos contaminantes a los suelos, por lo que están prohibidos en la actualidad.
Características de la fosa séptica de obra
Una de las características de la fosa séptica más importantes es la presencia de un filtro biológico. Es algo que hemos comentado en el apartado anterior: el pozo ciego no trata las aguas residuales, mientras que una fosa séptica sí, y lo hace precisamente mediante las bacterias que descomponen dichos residuos. No todos, y siempre quedan residuos que deben ser retirados periódicamente. Pero al menos la mitad de ellos se tratan con estos filtros biológicos. Esto reduce, entre otras cosas, los malos olores de la fosa.
Además, las fosas sépticas también se caracterizan por disponer de una óptima profundidad. Y es que deben presentar la suficiente profundidad para que las tuberías que llegan desde la vivienda posean un recorrido adecuado. Por otro lado, no deben tener tan profundidad como para alcanzar las aguas del propio suelo, ya que esto supondría una contaminación del suelo muy peligrosa. En ese sentido, debe darse en el clavo y por eso es imprescindible dejar la construcción de la fosa séptica en manos expertas.
Ventajas de las fosas sépticas de obra
Las ventajas de las fosas sépticas de obra son múltiples. Entre ellas, que son unas estructuras económicas. Si bien pueden presentar un desafío en ocasiones, los especialistas de la pocería disponen de conocimientos y medios técnicos necesarios para construirla con relativa facilidad y eficiencia. Además, estas estructuras permanecen enterradas, lo que evita muchas molestias adicionales tanto a nivel estético como de olores. No hay mejor alternativa cuando se carece de conexión con el alcantarillado público.
Cómo hacer una fosa séptica de obra
Para los profesionales del sector el procedimiento es muy sencillo. En primera instancia, analizamos de una manera muy meticulosamente el espacio, los obstáculos, las posibilidades y cualquier otra particularidad de la situación que pueda afectar a la construcción. Una vez tenemos esto claro, desarrollamos un plan para la instalación bien detallado. Por último, procedemos con la construcción en sí. Ponte siempre en manos de especialistas que conozcan cómo hacer una fosa séptica de obra.
Mantenimiento de la fosa séptica de obra
El mantenimiento de una fosa séptica de obra es fundamental. En primer lugar, porque es la única forma de que esta ofrezca siempre el mejor rendimiento posible. En segundo lugar, porque es el camino para impedir que los malos olores alcancen la vivienda. Y, en tercer lugar, porque es así como puedes evitar que sufra una avería. Entre estas tareas se incluyen el vaciado, la limpieza de los filtros y el vertido de las bacterias.
Cuánto vale una fosa séptica de obra
El precio de una fosa séptica de obra varía en función de factores como la localización, el espacio, el número de personas que habitan en la vivienda o la empresa constructora. No obstante, y según Habitissimo, portal especializado en comparación de precios, estos procedimientos suelen salir por unos 1.400 euros de media, aunque los precios pueden bajar hasta los 200 euros y subir hasta los 4.000 euros. No te fies de unos precios excesivamente bajos ni excesivamente altos. Busca precios razonables.