No cabe ninguna duda de que el agua es esencial para la vida. Sin embargo, también puede ser portadora de microorganismos y sustancias que pueden provocar enfermedades.
En este post queremos informarte sobre las enfermedades en el agua, para que puedas protegerte a ti mismo y a los que te rodean.
¿Se pueden contraer enfermedades por tomar agua en mal estado?
Sí, definitivamente. El agua en mal estado puede contener microorganismos o productos químicos peligrosos que pueden causar enfermedades.
Estos patógenos pueden incluir bacterias, virus y parásitos que, una vez en el cuerpo humano, son capaces de provocar diversos trastornos de salud. Por ello, es importante limpiar un aljibe de agua potable con regularidad y garantizar su desinfección.
Qué enfermedades son transmitidas por el agua
No podemos sobrevivir sin agua pero es importante saber que cuando está contaminada, también puede ser un medio de transmisión de varias enfermedades.
Los patógenos pueden contaminar el agua de diversas formas, incluyendo el derrame de aguas residuales, las precipitaciones que arrastran patógenos al agua y la contaminación directa por heces u orina de personas o animales infectados.
A continuación veremos algunas de las enfermedades más comunes transmitidas a través del agua.
Diarrea
La diarrea es una enfermedad común que puede ser causada por diversos microorganismos en el agua, incluyendo bacterias como E. coli y salmonella, virus como el rotavirus y el norovirus, y parásitos como la giardia y la cryptosporidium.
Los síntomas incluyen heces sueltas, deshidratación, náuseas, vómitos y, en casos graves, fiebre y pérdida de peso.
Hepatitis A
La Hepatitis A es una enfermedad viral que afecta al hígado. Se transmite principalmente a través del consumo de agua o alimentos contaminados por heces de una persona infectada.
Sus síntomas pueden variar desde una enfermedad leve hasta una enfermedad grave con ictericia, fatiga, dolor abdominal, náuseas y vómitos.
Paludismo
El paludismo es una enfermedad transmitida por mosquitos que depositan parásitos en el agua, donde se multiplican y luego infectan a las personas que entran en contacto con esa agua.
Entre sus síntomas encontramos fiebre, escalofríos, dolor de cabeza, vómitos y, en casos graves, puede provocar anemia, insuficiencia respiratoria y la muerte.
Cólera
El cólera es una enfermedad infecciosa aguda causada por la bacteria Vibrio cholerae, que se transmite a través del agua o alimentos contaminados con las heces de una persona infectada.
Causa diarrea severa, vómitos y deshidratación rápida que puede ser fatal si no se trata a tiempo.
Esquistosomiasis
La esquistosomiasis es una enfermedad parasitaria que se transmite cuando las personas entran en contacto con agua dulce contaminada con el parásito Schistosoma.
Los síntomas varían desde fiebre y fatiga hasta problemas hepáticos y de la vejiga a largo plazo.
Disentería
La disentería es una infección intestinal causada por bacterias o parásitos que se encuentran en el agua contaminada.
Puede causar diarrea severa con moco o sangre, fiebre, náuseas y dolor abdominal.
Tifus
El tifus es un grupo de infecciones bacterianas transmitidas por agua y alimentos contaminados con la bacteria Rickettsia.
Causa fiebre alta, dolor de cabeza, erupción cutánea y, en casos graves, puede afectar el corazón y el sistema nervioso.
Tracoma
El tracoma es una infección ocular causada por la bacteria Chlamydia trachomatis, que puede ser transmitida por agua contaminada.
Puede causar irritación en los ojos, secreción ocular y, si no se trata, puede conducir a la ceguera.
Fiebre tifoidea
La fiebre tifoidea es una enfermedad grave causada por la bacteria Salmonella Typhi, que se transmite a través del agua o alimentos contaminados con las heces de una persona infectada.
Los síntomas incluyen fiebre alta, dolor de cabeza, debilidad y dolor abdominal.
Poliomielitis
La poliomielitis es una enfermedad viral que se puede transmitir a través del agua o alimentos contaminados.
Aunque muchas personas no presentan síntomas, en algunos casos puede causar incluso parálisis.
Gracias a la vacunación, la poliomielitis se ha erradicado en la mayoría de las partes del mundo.
Cuáles son las bacterias del agua que causan enfermedades
El agua contaminada puede albergar una amplia variedad de microorganismos dañinos, entre los que se encuentran las bacterias y los parásitos.
Estos microorganismos pueden desencadenar una serie de enfermedades que varían en severidad, desde leves hasta potencialmente mortales.
Entamoeba histolytica
La Entamoeba histolytica es un parásito unicelular que causa la amebiasis, una infección intestinal que puede conducir a la disentería amebiana.
Los individuos pueden contraer este parásito al ingerir agua contaminada con heces que contengan este parásito.
Los síntomas pueden incluir diarrea, dolor abdominal y náuseas, aunque algunas personas pueden no presentar ningún síntoma.
Dracunculus medinensis
El Dracunculus medinensis, también conocido como gusano de Guinea, es un parásito que infecta a las personas cuando beben agua contaminada con pequeños crustáceos infectados con las larvas del gusano.
Con el tiempo, estos gusanos pueden crecer hasta un metro de longitud dentro del cuerpo y causar dolor e hinchazón cuando emergen a través de la piel.
Schistosoma
El género Schistosoma engloba una serie de parásitos responsables de la esquistosomiasis. Estos parásitos infectan a las personas cuando entran en contacto con agua dulce contaminada con las larvas del parásito.
Una vez en el cuerpo, los parásitos se alojan en los vasos sanguíneos y pueden causar una serie de problemas de salud, incluyendo daños en los órganos internos.
Cryptosporidium y Giardia intestinalis
Cryptosporidium y Giardia intestinalis son parásitos que se encuentran comúnmente en el agua contaminada.
Causan enfermedades diarreicas que pueden ser particularmente graves en personas con sistemas inmunitarios debilitados.
Los síntomas pueden incluir diarrea, náuseas, vómitos, calambres abdominales y deshidratación.
Cómo se puede contraer una enfermedad en el agua contaminada
Entender cómo se pueden contraer enfermedades a través del agua contaminada es fundamental para poder prevenirlas eficazmente.
Los patógenos presentes en el agua pueden entrar en nuestro cuerpo de varias formas, y conocer estos medios de transmisión es el primer paso para proteger nuestra salud.
Sigue leyendo para conocer las formas más comunes en las que las enfermedades transmitidas por el agua pueden propagarse.
Ingesta
Este es el modo más común de transmisión. Si bebes agua contaminada con bacterias, virus o parásitos, es probable que te enfermes.
Los patógenos entran en tu sistema digestivo y pueden causar una variedad de síntomas, desde diarrea y náuseas hasta fiebre y dolores abdominales.
Algunas de las enfermedades más comunes transmitidas por ingestión de agua contaminada incluyen la diarrea del viajero, la fiebre tifoidea, el cólera y la hepatitis A, tal y como hemos comentado anteriormente.
Mediante heridas
Si tienes una herida abierta y entra en contacto con agua contaminada, los patógenos pueden ingresar a tu cuerpo a través de la herida.
Esto es particularmente común en ambientes donde el agua puede estar contaminada con bacterias patógenas, como en piscinas públicas o aguas naturales.
Las bacterias presentes en el agua pueden causar infecciones en las heridas, que pueden variar desde una infección cutánea leve hasta una infección grave que puede requerir atención médica.
Contacto directo
Algunos patógenos pueden entrar en nuestro cuerpo a través del contacto directo con agua contaminada. Esto incluye el contacto con las membranas mucosas de los ojos, la boca o la nariz.
Por ejemplo, las bacterias que causan el tracoma, una enfermedad ocular que puede llevar a la ceguera, se transmiten a través del contacto con agua contaminada.
¿Se pueden padecer también enfermedades por beber agua de pozo?
Absolutamente, el agua de los pozos tiene todas las papeletas de ser una fuente de enfermedades si no se trata correctamente.
Aunque el agua subterránea a menudo está protegida de la contaminación directa, puede verse afectada por filtraciones de aguas residuales o por la presencia de patógenos en la capa superficial del suelo.
Las bacterias, los virus y los parásitos pueden infiltrarse en los pozos y contaminar el agua, especialmente si el pozo está mal sellado o si está ubicado cerca de una fuente de contaminación, como un sistema séptico o un campo agrícola.
Por tanto, es esencial tratar y analizar regularmente el agua de los pozos para asegurar su salubridad.
Qué hacer si te enfermas por beber agua no potable
Si crees que te has podido contagiar de alguna de las enfermedades mencionadas anteriormente, es importante que sigas los siguientes consejos:
- Busca atención médica inmediata. Si experimentas síntomas como diarrea, vómitos, fiebre, dolores abdominales, o cualquier otro signo de enfermedad tras consumir agua que sospechas que puede estar contaminada, debes buscar atención médica de inmediato. No intentes autodiagnosticarte o automedicarte, ya que esto puede empeorar tu situación.
- Informa a tu médico sobre el consumo de agua no potable. Asegúrate de informar a tu médico sobre la posibilidad de haber consumido agua contaminada. Esta información puede ser vital para que tu médico pueda diagnosticar correctamente tu enfermedad y prescribir el tratamiento adecuado.
- Mantén la hidratación. Las enfermedades transmitidas por el agua a menudo causan diarrea y vómitos, lo que puede llevar a la deshidratación. Intenta beber mucha agua potable y líquidos ricos en electrolitos para prevenir la deshidratación.
- Sigue las indicaciones de tu médico. Una vez que tu médico haya diagnosticado tu enfermedad, es crucial que sigas sus indicaciones al pie de la letra. Esto puede incluir la toma de medicamentos prescritos, la modificación de tu dieta y el reposo.
- Prevén la propagación a los demás. Muchas enfermedades transmitidas por el agua son contagiosas. Sigue las recomendaciones de los profesionales de la salud para evitar la propagación de la enfermedad a otras personas en tu hogar o comunidad.
- Reporta la fuente de agua contaminada. Si sospechas que la fuente de tu enfermedad es un suministro de agua específico, debes informar a las autoridades sanitarias locales para que puedan investigar y evitar que otras personas se enfermen.
- Implementa medidas preventivas para el futuro. Una vez que te hayas recuperado, es importante implementar medidas para prevenir futuras enfermedades. Esto puede incluir la instalación de un sistema de filtración de agua en tu hogar, hervir el agua antes de consumirla, o evitar fuentes de agua que sospeches que puedan estar contaminadas.
En conclusión, es fundamental ser consciente de que puede haber diversas enfermedades en el agua. Por este motivo, es de vital importancia asegurarse de que el agua que bebemos y usamos está limpia y es segura para su consumo.
Como expertos en pocería y redes de saneamiento de agua, te animamos a cuidar la calidad del agua y a tomar medidas para proteger tu salud y la de tu familia.