916690792

En muchas viviendas y edificaciones antiguas de Madrid, las tuberías de fibrocemento siguen siendo protagonistas en las redes de saneamiento. A simple vista, pueden parecer inofensivas, pero esconden un riesgo que conviene no pasar por alto: el amianto. En este artículo te vamos a contar todo lo que necesitas saber sobre las tuberías de fibrocemento, sus peligros, la normativa actual y cómo sustituirlas con seguridad.

Qué son las tuberías de fibrocemento y por qué se usaban

Las tuberías de fibrocemento, también conocidas como tuberías de uralita, fueron muy comunes en las obras entre los años 50 y 90.

Estaban fabricadas con una mezcla de cemento y fibras de amianto. Esta combinación ofrecía resistencia, bajo coste y facilidad de instalación. No es raro encontrarlas en redes de saneamiento, bajantes o conducciones de agua.

El problema es que el amianto, aunque práctico, es altamente perjudicial para la salud. Cuando las tuberías se deterioran, pueden liberar fibras al entorno, y ahí es donde empieza el peligro.

Riesgos de mantener tuberías de fibrocemento

Mantener estas instalaciones activas en tu edificio o vivienda no es buena idea. Te lo explicamos con claridad.

Riesgo para la salud

El amianto que contienen puede liberarse al romperse o desgastarse la tubería. Estas fibras, al ser inhaladas, provocan enfermedades respiratorias graves como la asbestosis, el mesotelioma o incluso el cáncer de pulmón.

Averías y fugas frecuentes

Las tuberías de fibrocemento tienen una vida útil limitada. Con el paso del tiempo, se agrietan, obstruyen o simplemente se rompen. Esto implica cortes en el suministro, fugas y gastos innecesarios.

Riesgo ambiental

Cuando una red de saneamiento obsoleta libera amianto, también contamina el entorno. Especialmente si las fugas acaban en zonas verdes, pozos o redes de aguas pluviales.

Normativa actual sobre tuberías de fibrocemento

La ley en España es muy clara en este asunto. No vale mirar para otro lado si tienes tuberías de fibrocemento en tu edificio.

Desde 2002 está prohibido utilizar amianto en la construcción. Además, la normativa de amianto obliga a retirar cualquier elemento que pueda liberar fibras peligrosas.

Cualquier trabajo de retirada de estos materiales debe estar gestionado por empresas especializadas y autorizadas. Es decir, no puedes improvisar ni delegar en cualquiera. Nosotros, como empresa registrada, cumplimos todos los requisitos legales para hacer este tipo de intervenciones.

Cómo se realiza la sustitución de fibrocemento en redes de saneamiento

La retirada y sustitución de tuberías de fibrocemento no es un proceso sencillo, pero se puede hacer de forma segura y eficiente.

Inspección inicial

Hacemos una inspección con cámara para verificar el estado de la red y confirmar si hay tuberías de fibrocemento. También valoramos su ubicación y grado de deterioro.

Planificación de los trabajos

Se elabora un plan de trabajo según la normativa vigente. Incluye protección para los trabajadores, medios técnicos, eliminación de residuos y fechas estimadas.

Retirada profesional de amianto

Los tramos de tubería afectados se desmontan con máxima precaución, evitando roturas. Se embalan y etiquetan como residuos peligrosos y se llevan a vertederos autorizados.

Sustitución por materiales modernos

Instalamos nuevas tuberías de PVC u otros materiales sin amianto. Son más resistentes, duraderos y fáciles de mantener. Y lo mejor: sin riesgos.

Cuándo deberías cambiar tus tuberías de fibrocemento

No hace falta que llegue una avería gorda o una emergencia para ponerte manos a la obra. En realidad, hay varios indicios bastante claros que te están diciendo: “¡Oye, toca renovar las tuberías de fibrocemento ya!”. Vamos a ver los más habituales.

Reformas integrales o parciales del edificio

Si estás metido en una reforma, aunque sea solo de una parte del inmueble, es el momento perfecto para revisar y cambiar las tuberías de fibrocemento. Ya tienes la obra abierta, hay acceso a instalaciones y se pueden coordinar los trabajos fácilmente. Aprovechar estas reformas para hacer el cambio te ahorra tiempo, dinero y dolores de cabeza en el futuro.

Malos olores persistentes o atascos frecuentes

¿Notas la presencia de malos olores en la cocina o en el baño? ¿Los desagües no tragan como deberían y se atascan cada dos por tres? Pues ojo, porque puede ser culpa de unas tuberías de fibrocemento deterioradas. Estas tuberías, al envejecer, se agrietan por dentro, acumulan residuos y pierden capacidad de conducción. Un problema que, además de desagradable, es síntoma de algo más serio.

Filtraciones o manchas de humedad en muros y suelos

Cuando hay filtraciones, es porque la tubería ya no aguanta más. Si empiezan a aparecer manchas oscuras en la pared o el suelo está más húmedo de lo normal, hay que sospechar. Las tuberías de fibrocemento que han superado su vida útil pueden provocar fugas imperceptibles al principio, pero que acaban dando lugar a humedades estructurales peligrosas.

Dictamen técnico que recomiende su retirada

En algunas inspecciones técnicas de edificios (ITE), los expertos ya lo dejan claro: toca cambiar las tuberías. Si un profesional con formación te dice que las tuyas están en mal estado o que contienen amianto, no lo dudes. El fibrocemento envejecido y en mal estado es una fuente de riesgo para todos los vecinos, y la recomendación de retirarlo no es opcional.

Requisitos legales en procesos de venta o alquiler

Si vas a vender o alquilar tu vivienda o local, es probable que te pidan un certificado que garantice que no hay materiales peligrosos en la red de saneamiento. Las tuberías de fibrocemento, por su contenido en amianto, están en el punto de mira. No contar con una instalación actualizada puede bloquear una operación inmobiliaria o restarle mucho valor al inmueble.

Ventajas de sustituir tuberías de fibrocemento

La sustitución de tuberías de fibrocemento no es solo una medida preventiva, es una inversión inteligente en salud, legalidad y tranquilidad. Aunque muchos piensan que mientras no haya una fuga todo va bien, lo cierto es que los beneficios de renovar estas instalaciones se notan desde el primer momento.

Reduces el peligro para la salud de los ocupantes

Lo más importante, sin duda, es que te libras del riesgo asociado al amianto. Las tuberías de fibrocemento pueden liberar fibras tóxicas al deteriorarse, y esas fibras, si se inhalan, pueden causar enfermedades muy graves. Al eliminarlas, proteges la salud de quienes viven o trabajan en el inmueble. No es un detalle menor, es una prioridad.

Evitas averías costosas a medio y largo plazo

Estas tuberías envejecen mal. Con el tiempo se agrietan, se deforman o se colapsan. Eso se traduce en atascos frecuentes, fugas ocultas y, en casos extremos, roturas que obligan a abrir suelos o paredes. La sustitución evita todo esto, y te ahorra dinero y disgustos con reparaciones de urgencia.

Cumples con la legalidad vigente

Desde hace años, la normativa en España prohíbe el uso del amianto y exige su retirada cuando representa un riesgo. Si mantienes las tuberías de fibrocemento sabiendo que están deterioradas, puedes tener problemas legales, sobre todo si se detecta en inspecciones o en trámites de venta. Renovar es también cumplir con la ley.

Mejoras el valor del inmueble y su eficiencia

Un edificio con instalaciones actualizadas tiene mejor valoración en el mercado. Si cambias las viejas tuberías de fibrocemento por materiales nuevos y seguros como el PVC, no solo te quitas un riesgo de encima, sino que haces más atractiva tu propiedad para futuros compradores o inquilinos. Además, las nuevas redes funcionan mejor y son más eficientes.

Ganas en tranquilidad

Saber que las tuberías están en buen estado y no suponen un peligro ni para ti ni para el entorno es un alivio. Olvídate de las fugas sorpresa, los olores desagradables o las visitas constantes del fontanero. La tranquilidad que da saber que todo está en orden, no tiene precio.

Una red segura empieza por eliminar el fibrocemento

Como has visto, las tuberías de fibrocemento son un riesgo oculto en muchos edificios de Madrid. Aunque parezcan inofensivas, pueden poner en peligro tu salud y la del entorno si no se actúa a tiempo. La buena noticia es que su retirada y sustitución es posible, segura y legal.

En nuestra empresa somos expertos en todo tipo de intervenciones relacionadas con las tuberías de fibrocemento, desde su diagnóstico hasta su retirada completa. Si sospechas que tu edificio puede tener este tipo de instalaciones, no dudes en contactarnos. Estaremos encantados de ayudarte y garantizar que tu red de saneamiento sea moderna, funcional y libre de riesgos.

Abrir chat
Hola 👋
¿En qué podemos ayudarte?